Mi foto
La Plata, Buenos Aires, Argentina

viernes, 26 de noviembre de 2010

Parece que viajamos en autitos chocadores atados a los extremos del tiempo

Este fin de año se parece cada vez más a una curva estrepitosa del tiempo. Como si el tiempo fueran un montón de sogas con autitos chocadores atados en cada extremo. En el medio un imán y nosotros repartidos entre los autitos, algunos arriba y otros abajo. Suena la alarma y el imán se activa y los extremos del tiempo se juntan y nos sacuden y nos hacen chocar y damos vueltas y chocamos, y no entendemos nada, no entendemos que pasa, y seguimos, y de golpe todo se detiene, y somos felices, y reímos, y vemos que muchos se cayeron, y después cuando los queremos ayudar a levantarse el tiempo se sacude de vuelta, así, de golpe, de repente y arrancan los autitos, y es noviembre, y es diciembre, y seguimos, y chocamos, y nos sacudimos mientras nos reímos de felicidad porque somos felices, aunque todavía no dejamos de llorar la muerte del mes pasado y ya nos damos cuenta de que otro más se ha ido; y así siguen pasando los meses y los años. Y el año pasado fue igual, y así será el siguiente, y el otro, y otro más. El tiempo se está retorciendo sobre sí mismo cada vez más rápido, cada vez más violento, y fugaz, y cada vez más sobre nosotros, y nosotros no nos damos cuenta, o nos damos tanto cuenta que no lo queremos ni mirar.

Cony (26-11-10)

1 comentario:

Moni dijo...

No sabés cómo me identifico con esta reflexión tuya, querida policromática !
Beso
Moni